Join Our Membership

Read Time:6 Minute, 37 Second

Durante nuestra adolescencia todos vivimos dos vidas, dos visiones del mundo. Por un lado aun tenemos nuestras casas, dejemos de lado que nuestro padre nos recordaba a cada rato que estábamos bajo su techo, por el otro estaba el resto del mundo, con todas esas chicas interesantes por conocer. En el caso de vosotras: chicos buenorros por conocer.

Mi cédula de identidad venezolana.
image-1691
Mi cédula de identidad venezolana.

En mi caso esa doble identidad era aun más acuciada. Casi a lo Batman.

Con mis sacro amigos del Calasanz escuchaba a Iron Maiden o Led Zeppelin, o Pink Floyd (Isaac fue quien me introdujo al «rock sinfónico»), nos metíamos a explorar cuevas llenas de símbolos satánicos y amuletos de bruja, o de vez en cuando, cuando el padre de alguno se iba de viaje, practicábamos Coctelería nivel -1 en su casa. ¡Dios! ¿Qué se supone que era esa porquería aquel día en casa de Moscú? ¿Un ruso negro?

Mis primeras tres borracheras fueron con ellos. Una fue la de la casa de Moscú, el susodicho dijo que él ponía la casa y la comida, a nosotros nos tocaba poner la bebida. Así que todos saqueamos el alijo de nuestros padres y pillamos una botella de lo que pensamos que extrañaría menos. Al final teníamos una nutrida colección de bebidas completamente dispares que iban desde el licor de menta hasta vinos afrutados. Ahora sabéis porque me pille una de las borracheras más alegres de mi vida.

Otra fue en casa de Barela cuando competí contra Daniel a ver quien tomaba más cervezas. Gane yo, 16 cervezas, porque no había más. Pero no fue ahí exactamente cuando me emborrache porque Gazzotti me la bajo bañándome con una botella de gaseosa a presión. La verdad es que hasta lo disfrute, estaba fresquita. El asunto fue paulatino y con efecto retardado. Resulta que sobro como un galón del coctel trampa que Daniel había perpetrado para supuestamente emborrachar a las chicas. Y no tenemos una mejor idea que tomárnoslo con el desayuno del siguiente día. Salí de casa de Daniel como una rosa pero para cuando llegue a mi casa me sentía como viajando en un platillo volador. Casi la peor borrachera de mi vida.

Y la más tonta de todas. La del asado en el hogar hispano de Valencia. Resulta que nos reunimos todos allí un domingo, un día sagrado de descanso en Venezuela. Llevamos de todo, la mejor carne, verduras, cubiertos, platos, refrescos, licores… pero nadie se acordó del carbón. Así que teníamos toda esta deliciosa comida cruda y nada para prepararla. Bien, después del fallido intento de cortar unos enormes bambú que decoraban las cercanías, alguien se ofreció a ir a buscar algún lugar abierto para comprar el carbón. Mientras, Daniel y yo empezamos a tomar unos sorbitos del dulce vino pasita que él había traído. Nos lo bebimos todo, la botella entera. Estaba tan pedo que hasta me creí una historia toda marciana que Toni y su novia me contaron. Ellos diciéndome «es que somos medio hermanos» y yo tan tranquilo les digo «pues sí, os parecéis y todo».

Verdaderamente los borrachos tienen ángel de la guarda porque aquel día yo llegue a la casa casi en automático. Y lo primero que hice al llegar fue zamparme como desesperado la cena para luego abonar con ella uno de los arboles del patio. Esta realmente casi fue la peor borrachera de mi vida.

Por otro lado estaba mi vida familiar. Con la ropa súper conservadora que mi papá me regalaba por mi cumpleaños, las cenas en familia, el acostarnos temprano, las cadenas de meditación, los viajes astrales… ¡Eh! Espera un momento, que esto seguro que no lo hacíais en vuestras casas.

Pues si, en mi adolescencia viví en la casa de los Weasley. Todo muy tranquilo, tradicional y familiar, excepto por lo referente a los duendes, espíritus elementales varios y el nosticismo. Ah sí, y viví en una casa embrujada (con posesión demoniaca incluida). Esa era una faceta de mi vida familiar que siempre mantuve separada de mis amigos porque quería disfrutar de nuestras tropelías sin sentido y no, por el contrario, convertirme en el chamán del curso. Creo que compartía con Barela la curiosidad por la metafísica pero fue a Daniel al único que le llegue a mostrar algo de mi mundo mágiko personal. Ya volveré sobre eso en un momento.

24 - Mi cumpleaños: todos eramos casi niños.
image-1692
24 – Mi cumpleaños: todos eramos casi niños.
25 - Mi cumpleaños: bien acompañado.
image-1693
25 – Mi cumpleaños: bien acompañado.

Es extraño pero casi no recuerdo nada de esta fiesta de cumpleaños. Me acuerdo más de mi fiesta de los 15 y de la radio azul de transistores que me regalaron. Mis fiestas de cumpleaños siempre son aburridas porque cumplo el dos de enero, ese día todo el mundo esta durmiendo la mona. Para colmo está casi a mitad de camino entre el 24 y el día de los Reyes Magos, así que siempre salia damnificado en lo que se refiere a regalos.

Eso sí, como veréis, estuve acompañado por toda mi familia y la familia Rosales. También estaban Julieta, Erika (que posa para la cámara en todas las fotos en las que sale) y su madre. Tan sólo falta Juan Diego, mi hermano menor, y no recuerdo porque. Es gracioso que recuerde más detalles de las fiestas en las que me emborrache que de está fiesta, también es un poco triste. Pero esa es la esencia de hacerte adulto, abandonas el mundo interior, seguro y mágico, para enfrentarte al exterior, que es duro y pragmático.

26 - Mi cumpleaños: Con mi familia.
image-1694
26 – Con mi familia.

27 - Mi cumpleaños: falta Coco.
image-1695
27 – Falta Coco.

28 - Mi cumpleaños: mis padres.
image-1696
28 – Mis padres.

29 - Mi cumpleaños: Pati y Alejo.
image-1697
29 – Con Pati y Alejo.

30 - Mi cumpleaños.
image-1698
30 – Mi cumpleaños.

31 - Mi cumpleaños.
image-1699
31 – Mi cumpleaños.

32 - Mi cumpleaños.
image-1700
32 – Mi cumpleaños.

33 - Mi cumpleaños.
image-1701
33 – Mi cumpleaños.

34 - Mi cumpleaños.
image-1702
34 – Mi cumpleaños.

Volviendo a la historia del día en el que Daniel flipo en colores.

En esos últimos años que pase en Venezuela me reunía de vez en cuando con un grupo de personas para hablar de metafísica y paranormalidades varias. Como suele ocurrir el grupo se fue reduciendo y al final quedamos cuatro personas, dos de ellas están en la foto de abajo. Con ellas hacia experimentos de todo tipo, sobretodo de proyección astral y control mental. Una chica del grupo tenía una capacidad increíble de proyectarse a sitios desconocidos y describirlos con lujo de detalles. Así que un día invite a Daniel a que me acompañara a una de nuestras reuniones y como sólo yo le conocía, aparte de lo diferente que era su casa por dentro de las del común, era el sujeto perfecto para ese tipo de experimento. Nos relajamos, concentramos y le pedí a Mary que se proyectará a casa de Daniel. Cuando empezó a describir en detalle como era la decoración del hogar de Daniel este puso los ojos como platos. Fue realmente divertido y creo que me estuvo hablando del tema todo el día.

Bueno, luego le hipnotizamos y le hicimos correr desnudo por la avenida Bolivar, pero como borramos su memoria, seguro que de esa parte no se acuerda. 😛

35 - Mis amigas metafísicas.
image-1703
35 – Mis amigas metafísicas.

Pues con esto y un par de bizcochos, doy por terminado mi relato.

Si habéis llegado tarde al programa podéis comenzar desde el principio del viaje aquí.

Estad pendientes porque pronto publicare en Cuyai la parte correspondiente a los años que viví en Medellín.

 

About Post Author

Santiago Valverde

Soy alegre, algo misántropo, con un ligero toque de humor negro. Me encanta la informática y el diseño gráfico, ir al cine, la música, leer y escribir. Como puedes ver, casi todas mis aficiones son de las que te dejan ciego a los 50, como le pasó a Sabato. He vivido en muchos países, por lo cual tengo un acento llamativo. Soy una persona comprometida con lo que creo, así que no te extrañe que terminemos teniendo charlas inteligentes. Disfruto siendo superficial por un momento pero las personas muy vacuas me aburren. Me gustaría encontrar personas que compartan conmigo el deseo de crear constantemente.
Happy
Happy
0 %
Sad
Sad
0 %
Excited
Excited
0 %
Sleepy
Sleepy
0 %
Angry
Angry
0 %
Surprise
Surprise
0 %

Average Rating

5 Star
0%
4 Star
0%
3 Star
0%
2 Star
0%
1 Star
0%

13 thoughts on “Viajando 22 años en mi pasado: mis dieciocho años

  1. Amigo Bichoverde…. Jajaja por su puesto que Gazotti te borro la voladora bañandote en refresco y de verdad si no os recuerdas ese detalle seguro se nos olvida … Y no por irrelevante sino por trivial ya que era costusbre ver detalles parecidos …. Asi como el dia que fuimos a la finca de Fernando frente e tumba Ayala en una fiesta de fin de aÑo y que de regreso rematamos en mi casa con las cervezas restantes…. Ya. tu memoria alcoholica te fallaba pues no te permitio recordar que regresamos en el. Autobus del primo de Moscu y fue alli y durante todo el viaje de regreso donde empezo todo lo del baÑo con la botella de refresco en esa epoca de vidrio, en manos de Gazotti. ……… Ahhh por cierto Dios sabe lo que hace y no nos junto hablar mas alla de lo fisico … Jajajaajaja ya que Maravhilion hoy en dia no se diera abasto en GYGAS virtuales para narrar todas las experiencias que al igual vivimos en Nuestra realidad Magika y que se asi como yo sabia que tu sabias ……. Jajjajaaj una vez mas una paradoja para el bichovicho …… Saludos gente. Rafael

    1. Heñor Viviano. Me he acordado de la vez que queríamos emborrachar a Gazotti para afeitarle las asilas, el tipo como que se la olía porque empezó a tirar las bebidas. En una de esas me baño con una de ellas, y joder, se notaba que eran para dejarlo pedo porque me ardían los ojos de la cantidad de ron que tenía eso.
      Esa vez por cierto fue cuando el gran sancocho de iguana en mi finca. Recuerdo a Isaac casi abrazado a la hoya zampando con una sonrisa de oreja a oreja. ¿Te acuerdas de la cara que puso cuando le mostramos el rabo de la difunta? 😀
      Realmente habría sido interesante compartir esa realidad pero creo que al final el cuadro quedo bien pintado tal como se hizo. Todos eramos al fin de cuentas unos grandes maestros.
      Un abrazo gran amigo.

  2. El sancocho de Iguana ….. Jajaja como se te pudo olvidar esa ? Lo cierto fue que pensaron que era pollo hasta constatar cuando sacasteis el rabo que realmente era de reptil y no de ave jajajajaj pero el gran detalle lo recuerdo claro y es que el animal en cuestion estaba en un saco en la cocina que tenia el papa en el taller situado detras de la lavadora ya que alli la habia dejado uno de los perros del papa de santiago despues de matarla en horas tempranas de la tarde. Una vez mas Isaac salio Jorgeado asi como Dario y otros pues solo sabiamos del preciado condimento del hervido Santiago – German y mi persona. Y sin contarles que se salvo el rabipelado que estaba congelado en el Frizer de la nevera jajaja casi casi tuvo el mismo final. Por cierto esa noche jorge Isaac casi pone fin a su para ese entonces naciente carrera de flautista virtuoso pues le exploto un cohete en la mano que por poco le vuela los dedos de haber sido un Danilo Anderson o un Bimladem de los de hoy en dia seguro pierde la mano…. Creo fue un tumbarrancho o algo parecido de la epoca… X dx!! Finalmente descubrimos esa noche que el timbre de la casa de. Valverde era un timbre de colegio que se activaba con un pulsador continuo y claro que dio pie a que las mentes retorcidas idearan para todas y cada una de las proximas salidas del clan en los proximos 2 años restantes terminaran con ir a tocar el timbre pulsador a cualquier hora de la noche y dejarle una cinta adhesiva pegada o una cuñita de madera o pedazo de plastico de vaso roto que mantuviese el timbre sonando y de regreso logicamente pasar a casa de german y daniel a culminar el ritual con el saludo correspondiente que ellos ya saben ….. Jaajajajajja que memorias inolvidables….

  3. Hermano Carlos, a mí pasa alrevés que a ti. Durante mi adolescencia me eché varias borracheras en fiestas, y todas las veces que eso pasó me dio amnesia alcohólica, o sea a partir de cierto momento todo se borraba de mi mente. Por ejemplo, yo estaba en una revista de estudiantes y una chama de ahí cumplió años. Fuimos a su casa a festejar. Sé que tomé mucho whisky (y eso que no me gusta). A las doce la madre corrió a todo el mundo de su casa. Yo me fui con unos chamos a caminar por la Av. Bolívar. Me acuerdo que fuimos al Nightclub Hollywood, vi a una linda chama bailando con poca ropa, y no recuerdo nada más de lo que pasó hasta las seis de la mañana que agarré un autobús para la casa.

  4. Coooo Juan esperemos ese cuento no sea como la vez que Moscu se emociono con una igual en LA Estrella … jajajaj y todos nosotros reiamos pues sabiamos se trataba de un Shemale …. jajajjajaaj ….. saludos

  5. Rafael me adivinaste el pensamiento. JD, de repente no fue efecto del alcohol sino del trauma. jejejeje, lo que borro tu memoria.

    Hablando en serio,… de verdad, que voy en serio. German me enseño un truco, gracias y felicidades, que es tomar mucha agua. Igual te emborrachas pero no se te borra el cassette al otro día.

    ¡Ah, y Rafael! Recuerdo que una vez fuisteis a darme una serenata a las tantas, lo que no recuerdo fue por qué, y al otro día mi padre me soltó una bronca que no veas. Lo que me recuerda la vez que nos colamos en el Calasanz en mitad de la noche para cantarle las mañanitas al cabecilla de los curas. Que pena, pero no me acuerdo de su nombre.

    Un abrazo.

  6. Como verais es una cadena interminable de cuentos y es asi….. Se trataba del cumplecuantos del Padre Santos !!! Y si nos coleamos todos cual chorizos en medio de la tarde y al llegar al patio interno lanzamos unos explosivos que les obligaron a asomar por el balcon del 3er piso de la residencia y el grito fue ISAAC- BARELA- HERRERA !!! No os escondais que los he visto!! E inmediatamente soltamos el grito conjunto de » Estas son las mañanitas que cantaba ….. » . Lo que no recuerdo fue para donde reventamos despues al salir de alli pues si se que el dia siguiente continuo la juerga … Y volvimos a cantarle al padre Santos. De eso si conservo alguna foto … Inclusive del bedel AMADOR…. !

    1. Me acuerdo que después de salir fuimos a un parque que estaba por detrás y a la izquierda del Calasanz. Desde allí repetimos la serenata y nos fuimos pero el dato de adónde, eso si no lo recuerdo.

      En otra ocasión Daniel había «volado» una cruceta que bloqueaba un enorme tubo de desagüe al fondo del patio. El hecho fue realizado con nocturnidad y alevosía, lo que nos permitió escaparnos al día siguiente e ir al centro comercial Tropicana (creo que ese era el nombre), donde nos dio caza más tarde el padre Manolo en su Manolomóvil. No me acuerdo si en esa ocasión nos pillo o le dimos esquinazo. Como lo de escaparnos era una especie de reto para algunos de nosotros, la escapada y la consiguiente persecución y captura se repitieron unas cuantas veces.

      Por cierto que las fotos que cuentas me gustaría mucho verlas.

      Un abrazo amigo.

  7. Jajaja si de fugarse se trataba nada como la vez que nos jubilamos Isaac – German y mi persona … Saliendo por el mismo hueco al final del patio detras de los autobuses..m lo cierto fue que engañosamente le dijimos a German ibamos a Guacara a buscar unas Diablas nos embarcamos en autobuses y bajo engaño y no me preguntes como no se dio cuenta sino cuando trancabamos en el terminal del Nuevo circo que estabamos via Caracas …. Siii Caracas fuimos al boulevard de Sabana grande a buscar un no se que en una tienda y German salio Jorgeado y la Calentera le duro semanas acompañada de la mamadera de gallo que le montamos bebiendonos su sangre x dx !!!

    1. jejejeeee… Bonísima esa. Hablando de los autobuses, ¿te acuerdas cuando nos escondíamos detrás de ellos a fumarnos los cigarrillos que comprábamos en el mercado de las Pulgas? Una vez Manolo se acerco por un lado con su carro (coche) y todo el mundo a correr para salir por el lado contrario. No sé como hizo el desgraciado pero cuando salimos el tipo estaba en el otro lado apoyado en su carro y con una sonrisa de oreja a oreja esperándonos.
      Ese tipo se las sabia todas, creo que por eso era tan divertido tratar de darle esquinazo. 😀

    2. veo que sali a relucir. Fuimos a buscar unas cuerdas para guitarra que para mala leche me consegui en caracas a un amigo de mi papa, el cual no tardo 12 horas para notificar mi presencia en ccs, gracias a un par de H… de P….. que no tenian oficio ese dia.

Responder a Dr Rafael Barela Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Close